Ser honesto o ser integro,
existe alguna diferencia en nuestros días, hoy descubrí en una simple historia que existe una diferencia enorme entre ser honesto o integro, disfrútenlo amigos.
Un hombre pide una pizza por
delivery, la pizza llega al hotel donde el está alojado, de repente la mujer
que lo acompaña abre la caja y le dice, amor no hay pizza, el responde, como
que no hay pizza, ella le dice que efectivamente no hay pizza en la caja y con
una alegría inesperada le dice, amor hay dólares, como qué dólares dice el, y
ella responde, siii dólares, los cuenta y resulta que habían 1800 dolares, wouww
dice ella, lo abraza, lo besa y dice amor tenemos 1800 dólares, la pizza costo
16 dólares y ahora tenemos 1800.
Él se queda mirando los
dólares, y se alegra, se ríe, pero le dice a la mujer, no no no, me acorde de
algo que decía mi padre y si algo me enseño es a ser honesto, entonces mete
todo el dinero en la caja, la cierra, en ese instante ella le dice, usted es el
único tonto en todo el país que va hacer lo que estoy pensando que va hacer, el
responde y dice si vamos acompáñame a devolver la caja con el dinero, ella como
es de suponer va al costado furiosa y reclamando tal hecho de honestidad,
cuando llegan, él va decidido con su acto y entrega la caja en la pizzería,
cuando los empleados de la pizzería ven semejante acto, lo aplauden, lo
abrazan, le agradecen y felicitan, entonces le preguntan… ¿usted escuchó el
anuncio en la radio?, el responde, ¿cuál anuncio?, el de la caja perdida señor,
responde el empleado de la pizzería, y le dice mi hermano trabaja en la radio y
difundió un anuncio de la caja perdida, usted no escucho el anuncio, el
responde categóricamente, no, entonces le preguntan y porque trajo la caja, el
responde porque es lo más honesto, señor, personas como usted ya no hay en este
país, justo mi hermano ya viene para acá y quiere que le cuente a todo el mundo
lo que hizo y difundir su gran ejemplo.
El hombre mira su reloj nervioso,
y dice, disculpa amigo, pero no tengo tiempo, me tengo que ir ya, no puedo
salir en ninguna entrevista, yo solo quiero mi pizza e irme, ha bueno le dice
el empleado, entonces déjeme su nombre, sus datos y su teléfono y le cuento a
los medios lo que usted hizo porque usted es un gran ejemplo y estamos muy agradecidos,
en ese momento el hombre toma del hombro al empleado de la pizzería y lo lleva
a una esquina y le dice, ni se le ocurra decir quién soy, pero porque señor si
lo que usted hizo es admirable, siiii y me gustaría salir en la radio, en los
medios y decir que devolví la caja pero no puedo, pero porque no puede señor,
el hombre mira a todos lados y con voz baja le dice: “porque la mujer que está
conmigo no es mi esposa”, como voy a salir en la radio diciendo que estaba en
un hotel y que pedí un pizza, nooo amigo invéntese otro cuento que yo me tengo
que ir, entonces tomo la pizza y sin más ni más se fue.
Esta historia me obliga
hacer la pregunta del millón, ¿era un hombre honesto?, yo creo que si porque
entrego la caja, pero ¿era un hombre íntegro?, ahí está el problema, la
respuesta es no, y sabes porque:
- Honestidad
habla de lo que yo hago, integridad habla de lo que yo soy.
- Honestidad
habla de lo que yo digo, integridad habla de lo que yo pienso.
-
Honestidad habla de mis actos públicos,
integridad habla de mis propios actos aunque nadie me esté viendo.
De que te sirve engañar al
mundo entero, si hay una generación llamada hijos, que está viendo lo que
somos, la integridad es algo que se transmite de generación en generación, no
es algo que se enseña, es un requisito previo para el éxito personal, es la
mejor forma de desarrollar confianza y demostrar liderazgo, mantiene el
equilibrio y atrae satisfacciones y te abre muchas puertas, si quieres ver la historia contada por su propio protagonista, te dejo el video, gracias Yokoi Kenyi, por compartir tu historia.
Te animas a practicarla, suerte……….
Te animas a practicarla, suerte……….
Gary
Artica Hernández…………….